martes, 25 de agosto de 2009

Y de nuevo, nadie hace nada

Acabo de leer ese tipo de artículos que hacen hervir la sangre de cualquiera, realmente te dan ganas de golpear unas cuantas cabezas.
Pongámonos en situación, Somalia, un país tercermundista, donde una pequeña de 13 años es violada. La niña, como en cualquier país del mundo, denuncia, pero a diferencia de un país civilizado, ella es la que será castigada, según la ley islámica, cometió adulterio, y por ello debe morir lapidada.

¿Y los países del primer mundo que hacen? Absolutamente nada, como era de esperar, se conoce la situación, pero se permite, ¿por que? Por que es mas cómodo estar en el balneario relajándote, que tratar de ayudar a este tipo de personas, de niños.

Lo mejor de todo, es que al final, en esos países, se cree que lo que hacen esta bien, y lo digo por experiencia. En mi instituto había una chica musulmana, llevaba 9 años viviendo en España y llevaba el pañuelo en la cabeza(no me parece mal, es cosa de su religión, como quien aquí lleva el crucifijo o se cuelga una imagen de la virgen sobre su cama) Un día, fuimos a hacer un examen, y en la parte de lengua castellana, nos pedían que diéramos una opinión sobre un articulo parecido a este(la diferencia es que a la chica que lapidaron entonces, fue violada por 7 hombres y al estar ella en esos momentos con un amigo en vez de con su padre o su marido) según esta chica, eso era mentira, que el articulo ponía a su pueblo como unos incivilizados que maltrataban a las mujeres…que ellos trataban mejor a las mujeres que en España, por que según ella, si una mujer era violada, inmediatamente el hombre que la violaba tenia que casarse con ella….

Tratamos de discutir con ella sobre ese tema, pero no daba su brazo a torcer, aunque la discusión no fuera sobre ese tema (no creo que permitieran casarse a la mujer con 7 hombres, y entonces,¿ a que venia lapidarla?)

Al final, después de leer esta noticia…simplemente sentí impotencia, por que al final, yo no puedo hacer nada, y los que pueden hacerlo, no desean impedirlo

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